Pensando en sinergia social, se logró una acercamiento con la cárcel del municipio de Rionegro, para buscar estrategias de rehabilitación al momento de su salida, la Fundación ha podido ofrecerle a los reclusos capacitación por medio de la cual pueden realizar trabajos manuales que les genera un espacio de esparcimiento, algunos dividendos económicos a la vez que los hace sentir útiles a la sociedad. Los reclusos hacen manillas y otros elementos de bisutería que son vendidos generando así ingresos para la Fundación y sustento para ellos.